Un Cowboy en Houston

Hoy quise volver a escribir y luego de mi desahogo político, ya me siento mas aliviado, porque veo un cambio radical en la selección de candidatos políticos, ya ahora no los buscan por capacitados, ni merengueros, peloteros o por feos, ahora es el momento de la hermosear al poder, a llevar a las Reinas de belleza a puestos políticos, bueeeno nos salvamos.
Quizás así asistirían más a las reuniones los funcionarios, pero mejor le dejo la tarea de criticar a Boquechivo y a otros filósofos políticos dominicanos.

Iniciada ya la Primavera , notamos de nuevo, los cambios del clima y la sabiduría de la naturaleza, y descubro el porque llamamos al verde el "Color de la Esperanza" , y es que al ver brotar los retoños en los árboles con ese verde tan particular, vemos el futuro que se avecina lleno de flores y frutos, nos hacen olvidar las ramas secas, el tiempo inclemente, y ya pronto veremos la belleza y el colorido de la vida en todo su esplendor.

Y así ha pasado con nosotros, pasamos por momentos difíciles, pero cuando nos cambia el panorama, rápido se olvida y vemos llegar la felicidad. Ver de nuevo a nuestras hijas que regresan en Semana Santa, estar con mis padres y poder compartir con todos ellos unos días, son un gran oasis en esta espera, es sentir ese calor que solo dan los abrazos de un ser querido, el mismo calor que sentimos cuando nos abraza el Señor con sus cuidados.
Debemos pedir, pero seguir dando gracias después de recibir las cosas buenas, para que se mantengan.

Estos días han pasado muchas cosas buenas, cumplimos Brenda y Yo 20 años de feliz matrimonio, y tuvimos la dicha de que nuestros amigos aquí en Houston dieron otra muestra de apoyo y solidaridad, y nos lo celebraron de una forma tal que solo con Amor se logra, un día para nunca olvidar, lleno de detalles especiales y emociones, gracias del Alma a todos ellos, porque ese cariño que nos brindan no se puede comprar.

También hemos participado en algunos eventos y retiros, que aunque pudiéramos pensar que no nos iban a aportar grandes cosas, realmente llenaron su cometido, y cada día aprendemos más dando y recibiendo estas experiencias de la vida.

Recibimos también la visita de mi hermana Zamira, y fue de gran alegría, sobre todo que ella pudiera verme muy diferente a como me dejó un año y medio atrás, hoy restablecido, ya las visitas son un placer y nos hacen sentir guías turísticos y nos permiten pasear y conocer nuevos lugares. Hemos disfrutado del más grande evento aquí que es el Rodeo de Houston, con una trayectoria de mas de 80 y tantos años, 3 semanas intensas de eventos, todo un espectáculo para vivir, y una ciudad que se transforma llenándose de botas y sombreros.

También hemos podido compartir con dominicanos que han venido a Houston por razones medicas, estos han pasado de ser desconocidos, a ser parte de la familia, y aunque ellos crean que les hacemos un favor, los mas beneficiados somos nosotros al poder retribuir tanto amor y solidaridad que nos han brindado, dando un nuevo sentido a nuestra permanencia por aquí.

He tratado sobre todas las cosas devolver los correos que recibo, pero ha sido muy difícil, el que no les devuelva a cada una de sus respuestas, no piensen que no les leo, al contrario son esas respuestas la que mantienen latiendo mi corazón, saber de sus oraciones, de sus buenas intensiones, son las que me animan a escribirles y sobre todo el que me llenan de esperanza, de querer regresar y confundirnos con un gran abrazo, para sentir en mi cuerpo, ese amor que ustedes me dan, valorizo muchísimo los mensajes de los amigos, pero cuando leo los que me envían quienes no me conocen, reconozco que hay que tener mucho valor y estar lleno de amor para compartirlo con un desconocido. Su palabras son para mi como los aplausos para los artistas, un gran aliciente para continuar.

Siempre hemos oído que la Semana Santa es tiempo de Meditar y compartir, esta vez de nuevo les pido compartir las oraciones con la familia que les llamamos los Luchadores que hasta ahora todo marcha bien y por unos jóvenes dominicanos que hoy se debaten entre la vida y la muerte, y sus familiares, pidamos por todos para que puedan descubrir las cosas buenas que suceden dentro de la adversidad, y darle un sentido al porque pasan las cosas.
En un hermoso gesto los compañeros de promoción del colegio de estos jóvenes, han aportado todo el dinero recaudado para su graduación, para ayudar a cubrir los gastos médicos, y tienen una cuenta abierta para otras ayudas muy necesarias, cualquier información pudiera obtenerla.

Yo he sentido todo el poder de las oraciones y la fuerza de la solidaridad, y en todo ello siento la mano del Señor que nos acompaña.Y vuelvo a repetir que, el mandamiento de “Amar a tu prójimo como a ti mismo” se hace una realidad en mi, gracias por amarme tanto.

Hasta pronto.
Miguel