Hace exactamente un año que vine a Houston, a mejorar una condición cardíaca, pero parece que el Señor tenía otros planes para mí, y no me había dado cuenta.
Al hacer un recuento de todo lo sucedido, pudiera decir que a pesar de todo, el balance ha sido positivo, todo lo sucedido fue suplantado por una serie de bendiciones que han ido sucediendo en cadena.
Pudiera decir en términos de informática, que mi motherboard, (cuerpo de la computadora), se vio afectado de forma repentina durante una reparación, quedando con grandes daños, esto provocó, que se me formateara todo el disco duro, y se me colocara un dispositivo externo como ayuda para funcionar. He tenido que programarme desde cero, con antivirus y todo (Fe).
Ha sido un año totalmente diferente, alejado de toda la rutina que me envolvía, un período de sacrificio, expectativas y satisfacciones.
Físicamente he tenido una recuperación milagrosa, recibiendo una nueva oportunidad de vida; del ánimo, hasta yo mismo me asombro como lo hemos manejado. A nivel de mi familia, la cual es mi mayor preocupación, ha sido algo asombroso, como a pesar de la distancia, cada día me siento mas cerca de mis hijas, como ellas han demostrado que se puede ser feliz a pesar de las adversidades, han crecido y madurado con responsabilidad, y me han llenado de alegría con sus visitas, así como me duele verlas partir, pero con la seguridad que eso es lo mejor para ellas.
De Brenda ya lo ha dicho y si pudiera lo proclamara fuerte a los cuatro vientos, no hay mayor sacrificio del que ha hecho por mi, por amor, por cumplir con su juramento de: “Hasta que la muerte nos separe”, el amor que recibo se desborda de mi capacidad.
Mis padres, total entrega, mi papa trabajando como un joven campeón, coordinando los trabajos y las remesas, y mi mama dejando su vida a un lado para acompañarnos en estos duros momentos, dando todo su calor, con sus atenciones y con el poder de sus oraciones.
Mis hermanas, pendientes de todo, han logrado la unidad no solo entre nosotros sino en toda la familia y amigos, y con todo su apoyo a las chicas.
Don Fernando (el papa de Brenda), que capacidad de entrega incondicional, cuanto amor y soporte a mis chicas, sus hermanos, gracias por tanto amor y atenciones, todos unidos, como si fuera una sola sangre.
Los hermanos y amigos que me han acompañado en este período, han logrado superar las distancias, y mantenerse cerca de nosotros con un contacto mayor que si estuviera allá, es esta respuesta solidaria de todos ustedes, lo que me hace seguir creyendo en el amor divino, cuando se cumple el mandamiento de amar a su prójimo como a mi mismo, aunque esto implique sacrificio y entrega.
He recibido una sobredosis de amor, que ha opacado todas las dolencias.
Como no agradecer a todos mis compañeros de trabajo, de todos los niveles, porque dan mas de un 100%, para cumplir con los compromisos, esperanzados en mi retorno; nuestros clientes que nos han seguido apoyando y han confiado en nuestra estructura, sin importar mi ausencia, gracias de verdad por seguirnos dando ese soporte.
Cuanta gente quisiera mencionar, y no puedo, pero todo el que ha estado con nosotros sabe el valor que tiene eso para mí.
Si que ha sido un año de logros, a nivel de comunicación, he tenido que ponerme las pilas y ser creativo, he recibido de ustedes mas e-mails, que todos los que había leído en mi vida, nunca me imagine pasarme dos días devolviendo felicitaciones de cumpleaños y aun así algunos se me han quedado.
El Blog Latidos de Vida, otro invento y en este le doy todo el crédito a Brenda, ha permitido un mayor contacto con más de 2,300 entradas, así como los videos que han recorrido un camino inimaginable.
Ha sido un año de unidad, de demostrar la solidaridad, que no importan las banderas, las distancias ni las barreras, si todos unidos en una misma Fe, tratamos al otro como yo quisiera ser tratado, todos gozaríamos de este sabor que experimento.
Doy gracias a Dios por permitirme esta oportunidad de acercarme a el, de permitirme la distinción de sentirme su hijo amado, de tener la oportunidad de podar mi vida de banalidades, de enseñarme a disfrutar el diario vivir con las cosas simples, de recibir el aprecio de toda la gente que me conoce, por mantener en mi la esperanza de vivir y poder conocer a todos esos que me han dado su aprecio sin conocerme, por permitir que leas estos escritos que salen de lo mas hondo de mi alma, por dame la oportunidad de decirle a tanta gente que esa muestra de amistad y amor que recibo junto a la confianza en Dios, son mi mejor medicina.
Gracias Señor por dejarme ejercitar la paciencia, por darme las fuerzas para seguir confiando en ti como el padre que todo lo puede y me ama.
Al hacer un recuento de todo lo sucedido, pudiera decir que a pesar de todo, el balance ha sido positivo, todo lo sucedido fue suplantado por una serie de bendiciones que han ido sucediendo en cadena.
Pudiera decir en términos de informática, que mi motherboard, (cuerpo de la computadora), se vio afectado de forma repentina durante una reparación, quedando con grandes daños, esto provocó, que se me formateara todo el disco duro, y se me colocara un dispositivo externo como ayuda para funcionar. He tenido que programarme desde cero, con antivirus y todo (Fe).
Ha sido un año totalmente diferente, alejado de toda la rutina que me envolvía, un período de sacrificio, expectativas y satisfacciones.
Físicamente he tenido una recuperación milagrosa, recibiendo una nueva oportunidad de vida; del ánimo, hasta yo mismo me asombro como lo hemos manejado. A nivel de mi familia, la cual es mi mayor preocupación, ha sido algo asombroso, como a pesar de la distancia, cada día me siento mas cerca de mis hijas, como ellas han demostrado que se puede ser feliz a pesar de las adversidades, han crecido y madurado con responsabilidad, y me han llenado de alegría con sus visitas, así como me duele verlas partir, pero con la seguridad que eso es lo mejor para ellas.
De Brenda ya lo ha dicho y si pudiera lo proclamara fuerte a los cuatro vientos, no hay mayor sacrificio del que ha hecho por mi, por amor, por cumplir con su juramento de: “Hasta que la muerte nos separe”, el amor que recibo se desborda de mi capacidad.
Mis padres, total entrega, mi papa trabajando como un joven campeón, coordinando los trabajos y las remesas, y mi mama dejando su vida a un lado para acompañarnos en estos duros momentos, dando todo su calor, con sus atenciones y con el poder de sus oraciones.
Mis hermanas, pendientes de todo, han logrado la unidad no solo entre nosotros sino en toda la familia y amigos, y con todo su apoyo a las chicas.
Don Fernando (el papa de Brenda), que capacidad de entrega incondicional, cuanto amor y soporte a mis chicas, sus hermanos, gracias por tanto amor y atenciones, todos unidos, como si fuera una sola sangre.
Los hermanos y amigos que me han acompañado en este período, han logrado superar las distancias, y mantenerse cerca de nosotros con un contacto mayor que si estuviera allá, es esta respuesta solidaria de todos ustedes, lo que me hace seguir creyendo en el amor divino, cuando se cumple el mandamiento de amar a su prójimo como a mi mismo, aunque esto implique sacrificio y entrega.
He recibido una sobredosis de amor, que ha opacado todas las dolencias.
Como no agradecer a todos mis compañeros de trabajo, de todos los niveles, porque dan mas de un 100%, para cumplir con los compromisos, esperanzados en mi retorno; nuestros clientes que nos han seguido apoyando y han confiado en nuestra estructura, sin importar mi ausencia, gracias de verdad por seguirnos dando ese soporte.
Cuanta gente quisiera mencionar, y no puedo, pero todo el que ha estado con nosotros sabe el valor que tiene eso para mí.
Si que ha sido un año de logros, a nivel de comunicación, he tenido que ponerme las pilas y ser creativo, he recibido de ustedes mas e-mails, que todos los que había leído en mi vida, nunca me imagine pasarme dos días devolviendo felicitaciones de cumpleaños y aun así algunos se me han quedado.
El Blog Latidos de Vida, otro invento y en este le doy todo el crédito a Brenda, ha permitido un mayor contacto con más de 2,300 entradas, así como los videos que han recorrido un camino inimaginable.
Ha sido un año de unidad, de demostrar la solidaridad, que no importan las banderas, las distancias ni las barreras, si todos unidos en una misma Fe, tratamos al otro como yo quisiera ser tratado, todos gozaríamos de este sabor que experimento.
Doy gracias a Dios por permitirme esta oportunidad de acercarme a el, de permitirme la distinción de sentirme su hijo amado, de tener la oportunidad de podar mi vida de banalidades, de enseñarme a disfrutar el diario vivir con las cosas simples, de recibir el aprecio de toda la gente que me conoce, por mantener en mi la esperanza de vivir y poder conocer a todos esos que me han dado su aprecio sin conocerme, por permitir que leas estos escritos que salen de lo mas hondo de mi alma, por dame la oportunidad de decirle a tanta gente que esa muestra de amistad y amor que recibo junto a la confianza en Dios, son mi mejor medicina.
Gracias Señor por dejarme ejercitar la paciencia, por darme las fuerzas para seguir confiando en ti como el padre que todo lo puede y me ama.
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